
Diferentes tipos de alcoholismo: crónico y agudo
El alcoholismo, o la dipsomanía, se refiere al trastorno por consumo de alcohol, el cual se caracteriza por el uso excesivo y nocivo de bebidas alcohólicas y licor. Este trastorno presenta una fuerte necesidad de consumo, así como la presencia de dependencia física y psicológica del paciente hacia la sustancia, la cual se manifiesta en un síndrome de abstinencia cuando el sujeto no consume o reduce el consumo de alcohol. El alcoholismo se considera una enfermedad crónica, progresiva y mortal, que debe ser tratada con igual importancia que otras drogodependencias.
¿Qué diferentes tipos de alcoholismo existen?
Los tipos de alcoholismo pueden variar según el autor que los describa, principalmente tenemos el alcoholismo tipo 1 y 2.
Alcoholismo tipo 1
Este tipo de alcoholismo se caracteriza por conformarse de una población de adultos mayores a 25 años, los cuales presentan largos periodos de alto consumo, intercalado con periodos de abstinencia. Sin embargo, estos periodos se vuelven progresivamente más cortos, desarrollando una dependencia total al alcohol y con el tiempo enfermedades hepáticas.
Alcoholismo tipo 2
Se encuentra conformado por la población joven y adolescente, en el cual se asocian factores de violencia y arrestos policiales; este no se caracteriza por un aumento progresivo del consumo de alcohol. Ahora bien, se ha encontrado la enzima monoamina oxidasa, lo que se relaciona con una menor producción de serotonina, asimismo, tiene relación con factores genéticos heredados.
Tipos de consumo de alcohol y adicción al alcohol
Existe una clasificación de dependencia al alcohol o trastorno por consumo de alcohol.
Alcoholismo crónico
Esta forma de alcoholismo se desarrolla a largo plazo, se caracteriza por un patrón de consumo excesivo y continuado del alcohol. Los afectados experimentan la tolerancia, la necesidad de consumir cada vez dosis mayores para experimentar los efectos, por lo cual, se consolida el consumo abusivo.
Alcoholismo agudo
En el caso del consumo agudo se puede desarrollar rápidamente, desarrollando consecuencias graves en un corto periodo de tiempo. Este se caracteriza por periodos de consumo excesivo y comportamiento impulsivo, se pueden entender estos episodios como atracones de alcohol y se manifiestan problemas con el control de impulsos, comportamientos de riesgo, violentos, problemas de salud física y mental.
Alcoholismo funcional
Presenta este nombre porque no necesariamente interfiere con el funcionamiento o las actividades diarias del individuo. No aparentan conflicto alguno, incluso, pueden manifestar éxitos en áreas de su vida, no muestran los síntomas típicos del alcoholismo, referentes al deterioro físico o social. Sin embargo, el uso del alcohol se utiliza para hacerle frente al día a día, de forma ilimitada, suelen presentar negación, ocultar el consumo y minimizar los daños.

El alcoholismo según la clasificación de Jellinek
- Alcohólico Alpha: También conocido como consumo de evasión o consumo problemático de alcohol. Se presenta una dependencia al alcohol psicológico, con poco o ningún síntoma de abstinencia, presenta un control sobre el uso de la sustancia, más no lo abandona porque lo ayuda a afrontar alguna dolencia física o emocional.
- Alcohólico Beta: Se hace referencia al bebedor regular, aun cuando no presenta una dependencia física o abstinencia, los factores socioculturales de consumo de alcohol resultan determinantes. No existen síntomas de abstinencia, pero sí repercusiones en la salud, como polineuropatías, gastritis o cirrosis hepáticas.
- Alcohólica Épsilon o Dipsomanía: Se habla entonces de un bebedor episódico, presentan largos periodos de abstinencia, o consumo leve, hasta que este estado es interrumpido por una ingesta compulsiva, masiva e intensiva. Se relaciona con distimia epiléptica o ciclotímica, a estados crepusculares, con conductas semiautomáticas y amnesia posterior.
- Alcohólica Gamma: El alcoholismo gamma, se refiere al bebedor alcoholo manía, si está presente la dependencia fisiológica, aunque los factores psicológicos tienen un papel importante. Se trata de periodos de embriaguez por semanas o meses, con periodos de abstinencia. Puede caracterizarse por dependencia física, abstinencia y falta de control, tolerancia, adaptación al metabolismo celular y que los episodios no finalizan hasta que las repercusiones son graves.
- Alcohólico Delta: O bebedor alcoholizado, presenta las características del alcohólico gamma, junto con la incapacidad de abstenerse. Aparece dependencia fisiológica, psicológica y un componente social importante, el perfil de persona tiene una progresión lenta y se presenta tolerancia. No suele presentarse intoxicación debido a que no hay una conducta compulsiva.
Riesgos del consumo de alcohol en la salud
El consumo compulsivo de alcohol, ocasiona consecuencias negativas en la salud física y mental, así como en el área social. El uso prolongado y la dependencia del alcohol puede producir sangrado del estómago o esófago, inflamación y daños en el páncreas (pudiendo ser letal para el ser humano), daño en el hígado, puede provocar la muerte, desnutrición, cáncer de esófago, hígado, colon, cabeza, cuello, mamas y otras áreas. También, se presenta descontrol en la presión arterial, problemas cardíacos, entumecimiento en brazos y piernas, problemas en las erecciones, goteo en la orina y dificultad para orinar.
Señales de un problema con el alcohol
Algunas señales y síntomas que pueden indicar el abuso de alcohol o la dependencia alcohólica.
- Incapacidad para limitar la cantidad de alcohol que se consume.
- Tener la intención de reducir el consumo, incluso intentarlo sin éxito.
- Dedicar gran parte del tiempo a beber, conseguir alcohol o recuperarse del uso del mismo.
- Sentir antojos, náuseas o una necesidad intensa de consumir.
- Dificultad para cumplir con las obligaciones laborales, académicas o del hogar debido al consumo progresivo de alcohol.
- Continuar el consumo de alcohol a pesar de las consecuencias negativas en la vida del individuo.
- Abandonar o limitar actividades que no involucren el consumo de alcohol.
- Consumir alcohol en situaciones de riesgo.
- Desarrollar tolerancia al alcohol.
- Experimentar síndrome de abstinencia al dejar de consumir.
Tratamiento en Monte Fénix
El alcoholismo es una enfermedad crónica, para su recuperación, se necesita de un tratamiento especializado, diseñado por expertos en el área de las adicciones. En Monte Fénix, poseemos más de 3 décadas ayudando a la recuperación de personas con adicciones y enfermedades de salud mental.
El tratamiento de alcoholismo, requiere de la desintoxicación, atención médica, psicológica y psiquiátrica, con el objetivo de abarcar todas las áreas afectadas y que pueden dar pie o mantener la enfermedad. Como centro especializado, te invitamos a ser parte de nuestro programa de atención integral, logrando la recuperación exitosa y el alcance de la salud óptima.